entre el barbecho y la sequía

Prefiero pensar que es en barbecho donde estoy, porque lo de la sequía se me antoja terrible. No me apetece leer, no me apetece escribir, no me apetece pensar. Más o menos estoy desconocida. Si no fuera porque me mantengo firme en lo de dormir pensaría cosas raras.

Todo sirve y este proceso de bloqueo intelectual explotará por algún lado, quiero creer, y me dará el ataque creador absoluto de lo mismo pintar que fieltrear que escribir un relato sorprendente. Pero eso si estoy barbechando, porque como haya llegado la sequía pertinaz estoy lista.

De lo ultimito que leí antes de la caída, recuerdo un libro que me viene al pelo: Diccionario de literatura para snobs. Me viene al pelo porque yo soy súper snob, claro, y me siento de lo más reconfortada leyendo las breves historias que sólo interesan a los happy few entre los que me incluyo.

El autor (Fabrice Gaignault) repasa ácido y por orden alfabético los nombres de los autores que considera imprescindibles en la biblioteca de cualquier snob literario. El texto está acompañado de ilustraciones (sólo la portada es sensacional) en blanco, rojo y negro.

También me dio por John Berger y en unos meses he leído varios de sus libros. Ahora estoy con Con la esperanza entre los dientes (que no es lo mismo que con la esperanza atragantada, que también también), un diría ensayo sobre el significado del compromiso político, a partir del análisis de la esencia del terrorismo y del drama que el desarraigo supone a millones de refugiados. Literario a pesar de lo que pueda parecer.

Por lo demás, poco. Lo único que recuerdo de mis iniciales momentos de encefalograma plano es que me entusiasmé con la serie Bevilacqua de Lorenzo Silva. Lo del encefalograma no es malo, sino el estado ideal para leer policíacas sin las secuelas eruditas de los momentos snobs.

Musicalmente estoy de revival. De paseo con la negra flor a pueblos del mundo ¡extinguíos! No he llegado a pasar por la unión porque estoy tirando por un rollo más movida, pero a estas alturas del colapso mental ya no descarto nada.

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