y sin embargo...
... oye, si hay que hacer el payaso para animar a un amigo en horas bajas, se hace. Que hay que hacerlo con unas empanadillas por medio... tan bien. Llegué anoche a casa retorcida y derrotada. Cero glam. ¿Ganas de hacerme una cenita rica? No. Arrastrada de pies hasta la nevera mmm qué tenemos por aquí mmm empanadillas y croquetas vegetarianas mmm esto me vale mmm enciendo el horno y adentro mmm arrastrada de pies hacia la ducha, limpiaditas, pijama, batakurt (me he hecho con una superauténtica, un día pongo una foto), calcetines gordos que hace frío y vuelta de pies arrastrados a la cocina. Pffff mirada interna al horno y pffff qué pereza todo, de verdad. Mensajito de móvil de amigo con día amargo y espera que te voy a contar lo de mis empanadillas tristes y hacemos una competición de días malos. Una cosa llevó a la otra y ostras ¿eso que veo es una sacada de lengua? Tú mucho blablablá y lo que quieras, pero mi cena me está sacando la lengua. ...