mucha policía poca diverOH MY
Voy a pasar de puntillas por un tan tema delicado que estoy segura de que hiere todas las susceptibilidades del mundo: los hijos y su educación.
Parto de la base de que los padres hacemos lo que podemos. Ninguno tenemos el don de la magia parental y nos enfrentamos a cada situación sin libro. Es difícil enfrentarse a estos temas porque oye, cada uno hace lo que cree que es mejor para sus hijos, pero oye también, aquí estamos los demás para opinar.
Como sabéis, y si no lo sabéis ya os lo cuento, yo trabajo en el ayuntamiento de un pueblo pequeño. Pues bien, hace unos días un vecino se quejó porque la policía había multado a su hijo (supongo que de 18 o 19 años) por haberse saltado un stop. Que si afán recaudatorio por aquí, que si total es un stop por allá, que si estaban agazapados y el pobre chaval no los vio, que si no mola un pueblo con represión policial, que si así nos va...
Cuando me enteré del tema -el vecino por supuestísimo elevo su queja a las redes sociales para conseguir -supongo- aplauso, cariño y acompañamiento popular- pensé
os tras
¿Qué le estás transmitiendo a ese chaval, padre bienintencionado? ¿No sería mejor para él que le explicaras que hay cosas que no se deben hacer y que si las haces tienen consecuencias y que de todas las consecuencias imaginables -en este caso- la mejor que te puede pasar es pagar una multa?
Pfffff. Pensar que es mejor el esto-no-va-a-quedar-así y la queja correspondiente y el victimismo de vecino buenísimo que paga sus impuestos y al que aún así atropellan sin piedad las fuerzas de seguridad no me parece a mí que sea ni la mejor opción ni lo mejor que le puedes transmitir a tu hijo infractor.
Pero es lo que os digo: esto es lo que yo pienso y lo que yo pienso -según voy viendo en mi entorno- es muy políticamente incorrecto. Yo a mis hijos les haría (haré) pagar la multa que les corresponda y les seguiré explicando por qué existen las normas, por qué hay que cumplirlas y qué pasa si no se hace. Les seguiré explicando que los actos tienen consecuencias y que ellos son responsables de lo que hacen y de las consecuencias de lo que hacen.
Y seguiré insistiendo en que sobre todas las cosas deben respetar a los demás. Respeto. Es increíble la absoluta falta de respeto y de educación que nos rodea. En vez de respeto se transmite desprecio por el que piensa diferente, por lo que no nos gusta. Me canso de ver adolescentes sin criterio, sin capacidad de decidir, sin capacidad para agarrarse con fuerza a lo que les diferencia del resto.
Y me canso de ver a padres que no saben decir no.
Pfffff. Pensar que es mejor el esto-no-va-a-quedar-así y la queja correspondiente y el victimismo de vecino buenísimo que paga sus impuestos y al que aún así atropellan sin piedad las fuerzas de seguridad no me parece a mí que sea ni la mejor opción ni lo mejor que le puedes transmitir a tu hijo infractor.
Pero es lo que os digo: esto es lo que yo pienso y lo que yo pienso -según voy viendo en mi entorno- es muy políticamente incorrecto. Yo a mis hijos les haría (haré) pagar la multa que les corresponda y les seguiré explicando por qué existen las normas, por qué hay que cumplirlas y qué pasa si no se hace. Les seguiré explicando que los actos tienen consecuencias y que ellos son responsables de lo que hacen y de las consecuencias de lo que hacen.
Y seguiré insistiendo en que sobre todas las cosas deben respetar a los demás. Respeto. Es increíble la absoluta falta de respeto y de educación que nos rodea. En vez de respeto se transmite desprecio por el que piensa diferente, por lo que no nos gusta. Me canso de ver adolescentes sin criterio, sin capacidad de decidir, sin capacidad para agarrarse con fuerza a lo que les diferencia del resto.
Y me canso de ver a padres que no saben decir no.
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