hablar


Para no ser de mucho hablar, en los últimos tiempos vivo en un sinparar. Hablo de mi vida, hablo de mis penas, cuento lo que no leo, hablo a multitudes, hablo bajito, hablo sin querer y hablo sola, como mi abuela.

Hablo por hablar -reconozco que esto es muy ocasional- y hablo porque me sienta bien. Me siento bien. He descubierto que hablar, que contar, que airear las cosas de por ahí dentro es reconfortante. He descubierto que además hasta hay quien me escucha con interés.

Pero ahora estoy empezando a tener frío, así que abandono mis blablablas para ponerme mi nueva y calentita sudadera, muy de mi color y -entre nosotros- adquirida por usucapión.

Comentarios

Molando voy

Las buenas acciones y sus consecuencias

frases de pared