preparando un miniviaje

Esta semana se presenta, como poco, diferente. No sé si bien o mal. Los viajes en avión me espantan multiplicado por mil y eso es regu (no llega a mal) y los viajes de trabajo aunque son molones son estrés.

Pero si todo sale bien conoceré Sofía y repasearé por la península de Halkidiki, en Grecia, que me resulta divinísimo, la verdad. Mucho mejor, dónde va a parar, que este estar en la oficina escuchando voces y voces que blablablá y ñiñiñí.

Para esta vez me he pedido un buen paseo por Estagira. Jo, y si pudiera darme un baño en el mar ya sería la bomba, aunque me conformaré con una metida de pies. Me encantaría saber dibujar y llevar a mis viajes una libreta y pinturas y hacer dibujos de los rincones. Me imagino sentada en cualquier piedra dibujando, coloreando. ¿No os parece una ocupación bien romántica? A mí sí. Oye, lo mismo me animo y meto una caja de pinturas en la maleta, porque lo de las acuarelas va a ser mucho engañarme a mí misma. Venga, bah. ¿Quién dijo miedo?

El sábado me compré un cuaderno divino en la librería que os conté hace unos días (amapolas en octubre, en la calle Pelayo de Madrid, tenéis que ir). Es un cuaderno de Walt Whitman, el escritor con el que más me identifico de todos los tiempos. Lo compré para este viaje y lo que venga después. La lástima para esto de las pinturas y los colores es que tiene rayas y ahora vivo indecisa entre llevar este o llevar otro y qué demonios ME LLEVO EL DE WHITMAN A NUEVA YORK, que es mil millones mejor idea. Whitman y Nueva York son juntos. Me puede encantar escribir Nueva York en un cuaderno del manhattanísimo Walt.

Además del cuaderno y los colores estoy pensando en los libros. Últimamente me he comprado varios y me da rabia no llevarlos, pero para los viajes suelo tirar de ebook que me resulta más práctico por lo poco que abulta y lo mucho que puede contener. Hace un par de semanas compré varios libros electrónicos, así que tengo material, PERO estoy bien metida en un par de historias en papel que me va a dar rabia infinita dejar a medias.

También tengo que meter lo de nadar. Me consta que en el hotel hay piscina y a falta de calorcito y baños robados al mar, unos cuantos largos antes de desayunar fijo que caen.

Y el chubasquero, porque parecequevaallover, cosa que a mi siempre me viene bien.

Bueno y lo dejo aquí porque ME ACABAN DE REGALAR la publicación que sacó Life por el 50 aniversario de la muerte de RFK y estoy TAN emocionada que el viaje y la semana han pasado a segundo plano ya. 

Me acaba de superencantar este lunes.

Feliz semana a todos. 


L.

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